11 de diciembre de 2024
La industria es uno de los sectores más golpeados desde que Javier Milei asumió la presidencia. La caída de la producción manufacturera, según el INDEC, en los primeros ocho meses del año se retrajo 13,2%, una cifra muy superior a la media de la economía (-3,1%), y con la particularidad de que 15 de sus 16 ramas estuvieron en retracción. Entre fines de 2023 y julio de 2024 también se contrajo en casi 1.100 la cantidad de empresas industriales activas y en 29.000 la cantidad de empleos industriales.
"La llegada al gobierno de Javier Milei en diciembre
de 2023 está suponiendo un nuevo viraje en la política industrial. De modo
mucho más pronunciado, aún que lo que fue en el período 2015-2019", resaltó
Fundar en su reciente informe titulado: "Luces y sombras de la política
industrial en Argentina en el siglo XXI" y elaborado por Daniel Schteingart,
Andrés Tavosnanska, Paula Isaak, Juan Manuel Antonietta y Matías Ginsberg.
Es en este marco de fuerte ajuste fiscal, recesión y eliminación de dispositivos de política industrial "que debe entenderse que los primeros meses estuvieron marcados por una total primacía de la política macroeconómica respecto a la política productiva y por una amplia vocación de reformas desreguladoras", señaló el documento.
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"La primacía de la
macro por sobre lo productivo se explica por la magnitud de los problemas
macroeconómicos heredados, pero fundamentalmente por la convicción de que la
intervención estatal en la economía en general y la política productiva en
particular generan problemas antes que soluciones. Detrás del enfoque económico
del nuevo gobierno, sobrevuela la idea de que 'la mejor política industrial es
aquella que no existe', tan típica del discurso predominante en los '80 y los
'90", destacó el estudio.
Por su parte,
Daniel Schteingart, director de Planificación Productiva en Fundar, sostuvo en
conferencia de prensa: "Aunque no lo digan, este gobierno no cree en las
políticas sectoriales, tiene escaso interés por las políticas productivas". A su
vez, Schteingart señaló que hubo un recorte mayor que durante la gestión de
Mauricio Macri en las partidas presupuestarias destinadas a ciencia, tecnología
e industria del 65% en términos reales, con un fuerte impacto en recortes de
políticas promotoras de la industria.
El análisis del
think tank también subrayó que durante el gobierno de Macri si bien la política
productiva perdió peso en la agenda y a nivel presupuestario, el gobierno
impulsó algunas iniciativas relevantes, como la Ley Pyme y la Ley de
Emprendedores.
La política industrial en Argentina: entre el
movimiento pendular y los resultados mixtos
El informe concluyó
que existe un movimiento pendular en la política industrial argentina en los
últimos años entre los gobiernos nacional populares y los liberales. Mientras
que los primeros la industria y el empleo industrial por lo general crecen pero
no se sostienen en el tiempo, en los gobiernos liberales la industria y el
empleo industrial por lo general se achican.
Los gobiernos
nacional populares "creen en la industria como motor del desarrollo, pero:
particularmente de las industrias que no son de base primaria y como descuidan
el sector primario, que genera dólares, terminan afectando la capacidad
exportadora de la economía y el propio crecimiento industrial.También "tienden
a ser proteccionistas frente a las importaciones para preservar el empleo" e
"incrementan la inversión pública en políticas industriales, con resultados
mixtos".
"Pero una parte
relevante de los esfuerzos de política industrial estuvieron destinados a
promover sectores de mínima agregación de valor o a sostener industrias poco
competitivas: el máximo ejemplo es el ensamble fueguino (cuyo gasto tributario
promedió el 0,31% del PIB en el siglo XXI, más que todo el gasto en función
ciencia y técnica o industria). Otro ejemplo: proteccionismo excesivo a
industrias de baja productividad, a costa de sobreprecios notables para los
consumidores", agregó Fundar.
Por su parte, los
gobiernos liberales ponen "particular foco en la macroeconomía y poner las
cuentas en orden", le dan "menor importancia de la política productiva", "no
creen en la industria como sector particularmente estratégico". A la vez que
"des financian la inversión pública en políticas industriales" y "Tienden
a ser aperturistas frente a las importaciones para bajar precios".
Sectores con mayor potencialidad
El estudio remarcó
la importancia de la industria. Representa casi el 20% del PBI, 2,6 millones de
puestos de trabajo directos y explica el 57% de las exportaciones de bienes y
servicios. Por otro parte, expresó que 4 bloques industriales tienen alta
potencialidad a futuro: la agroindustria, que representa un tercio del PBI de
toda la industria, la de capitales intensivos, la industria del conocimiento y
la metalmecánica y automotriz.
A su vez, señaló
que se debe ir hacia una "salida gradual del régimen de Tierra del Fuego",
debido a que la industria Ensambladora tiene un bajo potencial competitivo, y
se destina un gasto tributario del 0,31% del PBI, más que lo destinado a
ciencia, tecnología e industria.
Contexto internacional: el renacimiento de la
política industrial en el mundo
El informe de
Fundar también sostuvo que desde hace ya algunos años, y tras haber estado
fuera de la agenda durante varias décadas, la política industrial está "de
regreso" en las principales potencias. El estudio detalló algunas razones por
lo que pasa esto, entre ellas el crecimiento de la disputa tecnológica entre
China y Estados Unidos. Un segundo punto se debe al "objetivo de ganar márgenes
de autonomía en un contexto en donde las interdependencias crecientes producto
del auge de las cadenas globales de valor han generado ciertas vulnerabilidades
en las economías nacionales".
Por otra parte, el
cambio climático está jugando su peso ya que el interés "por los bienes y
servicios ligados a la transición energética está creciendo exponencialmente".
Otra razón detrás del creciente interés por la política productiva orientada a
la industria manufacturera "está también impulsado por la idea de que varias de
sus ramas son capaces de generar puestos de trabajo con una calidad superior a
la media de la economía, con elevados efectos multiplicadores sobre otros
sectores y, por todo ello, con un gran potencial para generar sociedades de
movilidad social ascendente", destacó el documento.
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